El pasado domingo 25 de mayo, Kehakuma volvió a aprovechar su presencia en la segunda edición del We Are Festival en Londres para ofrecer un 'line-up' muy representativo de la filosofía y valores de la fiesta así como de su total predisposición a promocionar la calidad musical.
Para la apertura de puertas a las 9 de la mañana, el sol ya deslumbraba sin la menor amenaza de nubes. Todo un regalo teniendo en cuenta que el buen tiempo se juega a cara o cruz en la capital inglesa y, desde luego, una señal de buen presagio que anunciaba un día cargado de buenas vibraciones. Johnny Bloomfield fue el encargado de abrir el escenario a base de House bajo en revoluciones al que le siguió Marino Canal, un joven artista español que seguro dará mucho de qué hablar en un futuro muy cercano.
Javi Bora, residente de Kehakuma, no tardó en hacerse con los controles de la pista. Era la una de la tarde y el mallorquín hizo gala de su buen hacer tras los platos mezclando clásicos como el 'Kids at Play' de Ron Trent o la cara A del 'Untitled EP' de Chez Damier junto a algunas de sus nuevas producciones en Robsoul.
Tras una hora y media de set, Javi pasó el mando a uno de los Dj’s más respetados y valorados de la escena internacional: Zip. Y es que el dueño del mítico sello Perlon demostró que la experiencia es un grado: bajó las pulsaciones musicales de la pista casi a niveles de paro cardíaco para emprender una sesión donde la tensión subiría de forma exponencial tras cada disco que hacían sonar las agujas. En definitiva una clase maestra de cómo llevar una sesión donde cada vinilo era tan desconocido y misterioso como el anterior.
A las 4 de la tarde tomó el relevo DJ Koze, otro de los pesos pesados del festival y del escenario Kehakuma. Conocido por su amplio abanico musical, el dueño del sello Pampa Records no vaciló ni un solo momento durante su sesión para el deleite de los asistentes que poco a poco llenaban la carpa hasta la bandera. Con el escenario a punto de colgar el cartel de aforo completo, le tocó el turno a Nina Kraviz. La dama rusa del House (o del Techno, para esta ocasión) no dejó indiferente a nadie: su selección impecable de cortes contundentes demostró la seriedad con la que la artista siempre afronta sus sesiones, permitiéndose alguna licencia más House como el 'Can I Kick it' de Dj Boom.
Tras el set de Nina le tocó el turno a Levon Vincent, uno de los productores más originales de los últimos años. El neoyorquino presentó un set muy variado donde tuvieron cabida desde el House más crudo a temas más ambientales. Sin duda una sesión para los oídos más experimentados del festival. Posteriormente llegaría Jus-Ed, dueño y señor de Underground Quality, sello de lanzadera tanto para Nina como para Levon, entre otros artistas. El norteamericano tuvo la oportunidad de tocar durante la transición de día a noche, un momento siempre especial que aprovechó para darle una connotación más Deep House al contenido de su sesión.
The Organ Grinder, habitual del sello 4Lux o Catapult, fue el encargado de poner punto y final a un día cargado de buena música. El de Cardiff cerró el escenario de Kehakuma en el segundo y último día del festival con una enérgica sesión a caballo entre el House más gamberro y el techno de corte más limpio.
Tras más de 14h de música, la pista de baile del escenario de Kehakuma quedó marcada por miles de huellas que servían como prueba irrefutable de que ese día la calidad musical de la fiesta más 'underground' de Space Ibiza es la mejor ilustración de la buena reputación de la que goza actualmente. Definitivamente, el mejor ejemplo de que la buena música prevalece sobre todo lo demás.
Desde Space Ibiza queremos agradecer una vez más a toda la organización del We Are Festival el excelente trato y el apoyo que nos han dado en esta edición. ¡Esperamos poder volver a reencontrarnos el año que viene!
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