Miles de clubbers se dieron cita los pasados 6 y 7 de Septiembre en el circuito de Sepang (Kuala Lumpur, Malasia) para celebrar la segunda edición de We Love Asia, y concretamente el sábado 7, día en el que Space Ibiza se encargaba de un escenario en el que se prometía un seguido de sesiones dignas del club más galardonado del mundo. ¡Y así fue! De las 3pm a las 2am, todo aquel que se acercaba por el Space Ibiza Stage bailaba frenéticamente a los ritmos de los artistas encargados de representar al club ibicenco. Sander Kleinenberg, Arno Cost, Mikael Veermets, Tomcraft y los residentes Camilo Franco y Danny Marquez no defraudaron y ofrecieron un recital de mezclas y música de baile de alto voltaje.
Estos últimos fueron los encargados de abrir el escenario, cada uno presentando sus argumentos a base de House, Progressive House, alguna resonancia Electro y ritmos altamente bailables; los mismos que pasean por las mejores salas del mundo durante la gira mundial Space Ibiza On Tour y que tantos galones les ha dado hasta hoy. También aprovecharon la ocasión para presentar temas inéditos que pronto verán la luz. Concluidas las sesiones de los residentes, fue el turno de Mikael Wermeets de explayarse ante los platos del escenario. El joven sueco ofreció un set muy fresco a la vez que variado; oscilando entre el Progressive House y el Tech House y desatando la locura entre los asistentes.
Acabado el set de Mikael, Tomcraft apareció como artista sorpresa y deleitó a los clubbers presentes con un set propio del DJ/productor alemán: Progressive House contundente y altamente bailable; ideal para ganarse un público en un tiempo record.
A modo de transición antes del plato fuerte, Arno Cost ofreció un set más melódico y elegante, aunque no menos potente que acabó de despertar la euforia que planeaba encima del Space Ibiza Stage y que continuó con la actuación del invitado estrella: Sander Kleinenberg. El polifacético artista holandés ofreció un set ecléctico y capaz de conquistar los oídos más afinados y exigentes.
Con este set se dio por concluido el festival y la epopeya de Space Ibiza en Kuala Lumpur donde consiguió su objetivo: Hacer disfrutar al público malasio y dejar huella en un festival que, tras su segunda edición, augura un gran futuro.